Pasó a cuarto intermedio la reunión entre el monopolio del transporte ERSA y los “pillos” de la UTA, esperando –según dijeron- la presencia del municipio, que durante todos los mandatos de la KK peroncha apareció sumiso a los aumentos de boletos que unilateralmente propusieron desde el poderoso grupo.
Es malicioso preguntarse entonces si a falta de rentabilidad a tal punto de no cubrir si quiera los salarios de los choferes, porqué el monopolio ERSA no cede esas trazas desiste legalmente de brindar el servicio y el municipio entonces organiza esas líneas a otros inversores con mayor capacidad de ingenio y creatividad.
En ese marco, el monopolio aclaró que “la tarifa aumentó a $9,50. Ahora pedimos urgente que el próximo boleto sea de $11, que responde a una actualización del 2017”, disparó Harfuch -quien quedó en reemplazo del doble agente Gustavo Larrea- como condicionante para aumentos salariales para los choferes.
El representante del monopolio en la reunión que mantuvieron con los siempre eternos pillos de la UTA que siempre se ponen del lado de Juan Carlos Romero, en el ámbito de Trabajo Provincial, confirmó que no estuvo el municipio, esperando que en la reunión del viernes a las 9:00 estén sus representantes, porque es fundamental que formen parte del debate.
Debate que es un circo montado por el monopolio ERSA para simular una discusión cuando en realidad todo ya está cocinado. El caso es una cuestión de tiempo de acuerdo a lo tenso que se presente el municipio.
Para eso está luego el grupo de choque cuasimafioso de la UTA que nunca dejó de ofrecerse como brazo ejecutor de los aprietes a los concejales o al propio municipio, siempre en favor del monopolio ERSA.
Ya desde tiempos inmemoriales la UTA sirvió al poder empresario o para chocar y abollar cualquier postura contra los intereses económicos leoninos, o en la reducción de los servicios con la quita de unidades en horarios picos y zonas estratégicas.
Desde el monopolio ERSA mientras tanto ya reiteraron la imposibilidad de hacer frente al aumento paritario de abril, esperando una compensación del Estado –con otro boletazo-, que permita que esto se lleve adelante.
