El hecho vale hoy para celebrar en Corrientes el día de la Policía y ocurrió el lunes en la comisaría del barrio La Olla. Los efectivos José Manuel Cardozo y Sergio López Palacios realizaron las maniobras que le salvaron la vida al pequeño. La madre había llevado a su hijo porque no respiraba.
Dos policías de la comisaría 21ª auxiliaron a un bebé de días y le salvaron la vida. Paula Escalante llegó a la dependencia policial de La Olla, en esta capital, con su pequeño Johnatan sin signos vitales. “Me salió del corazón”, dijo uno de los efectivos, recordando el hecho.
El cabo 1º José Manuel Cardozo y el oficial Sergio López Palacios le realizaron al bebé maniobras de RCP y lo reanimaron. Rápidamente lo trasladaron al CAPS del barrio 17 de Agosto, donde lograron estabilizarlo por completo.
“Me encontraba de guardia. Se acerca la señora llorando y diciéndonos que su hijo no respiraba, que estaba acostado y se dio cuenta de que no tenía signos vitales”, contó el cabo Cardozo.
“Puso al bebé en mis brazos, y ahí empecé a hacerle maniobra de RCP. Luego de 5 minutos, el niño dio un suspiro. Allí el oficial López Palacios me dijo para llevarlo a un centro asistencial”, relató.
El efectivo dijo que fueron con el bebé al CAPS del barrio 17 de Agosto, sin dejar de hacerle la reanimación. “Fue un momento de nervios y lo único que atinaba a hacer era seguir con la reanimación. Dio dos suspiros y abrió los ojos y después cerró”, contó.
“Entró en la salita y enseguida escuché su llanto. Fue muy hermoso. Me salió del corazón hacer eso”, agregó.
Efectivos policiales de la comisaría 21ª Urbana, ubicada en La Olla, lograron reanimar a un bebé de dos semanas y cuya madre lo había llevado hasta la dependencia policial ya que había dejado de respirar. Los oficiales, de apellidos Cardozo y López Palacios, le realizaron maniobras de reanimación al pequeño hasta trasladarlo a un centro asistencial
El hecho ocurrió el lunes, cerca de las 21.45. Una mujer de 33 años se presentó en la guardia de la comisaría de La Olla, totalmente desesperada y manifestando que su hijo no respiraba.
Ante esta situación, y al observar que el niño no manifestaba signos vitales, el cabo que se hallaba de guardia (Cardozo) inmediatamente tomó al bebé y comenzó a efectuar las maniobras de reanimación (RCP).
Ante la gravedad del caso, el oficial (López Palacios) tomó la determinación de trasladar en el móvil policial al niño y a su madre al centro de salud. En el trayecto, el bebé empezó a responder, abriendo los ojos y respirando levemente.
Una vez en el CAPS, fue entregado al personal del centro asistencial, quienes continuaron con las maniobras correspondientes, logrando que el niño reaccionara con un fuerte llanto, haciendo movimientos y respirando de forma autónoma. Posteriormente, el bebé fue derivado al área de neonatología del hospital Vidal.
Por el caso, se realizaron las diligencias y trámites de rigor correspondientes, destacando la actuación del personal policial. Su oportuna y rápida intervención fue fundamental para salvar al bebé.