Santa Rosa es una colonia que pertenece al departamento Concepción. Ambos están a escasos 15 kilómetros de distancia. A las dos les separa un abismo en su clase dirigencial y mientras la Capital del Gladiolo muestra hechos concretos de capacidad de gestión, en la tierra del Tambor de Tacuarí algunos se desangran en la mediocridad y la postergación marginal del atraso.
Toda comparación siempre es odiosa, pero es momento de mirar hacia el futuro de grandeza que incluya a todos y no solo a los ñoquis que atestan el edificio municipal de Concepción, socavando el progreso y quitando la posibilidad de desarrollo y crecimiento en favor de todos.
En Santa Rosa hace un corto tiempo decidieron soberanamente dar una vuelta de página a lo oscuro, al populismo de invitar al pescado sin enseñar a pescar, a vivir de fiesta y que la pague otro. Desde ese tiempo empezó a transformar la realidad con la verdad de los hechos. A gestionar con seriedad. A resolver los problemas de todos. A enterrar definitivamente al populismo barato que ”hacía, pero robaba”.
Bajo esa premisa Santa Rosa dio a conocer en las últimas horas que el municipio adquirió un tractor 0 km y un equipo barredor de arrastre para mantener limpias las arterias de su comunidad.
La compra de ambos equipos en Santa Rosa se realizó “con fondos genuinos, producto del pago de impuestos de los contribuyentes“, reza el comunicado oficial.
En Concepción todavía están esperando esa vuelta de página en su rica y orgullosa historia de hombres probos y luchadores. Un municipio con buenas intenciones, pero con pocas luces. Una intendencia con muchas ganas, pero sin demasiada convicción HONESTA.
Un intendente lleno de compromisos obligado a estar bien con el santo y con el diablo. Sin rumbo y solo con trofeos cortos para seguir en el trono, pero sucio.
Es momento de empezar a ”copiar” las buenas acciones de los vecinos para dejar sin maniobra a los que ya fueron capturados por el ocio y hoy abrumados por las sustancias no reparan en daño.
Hoy cualquier localidad pequeña del interior avanza y usa a la tecnología en los sistemas de CAMARAS DE VIDEOVIGILANCIA para preservar el bien público. Los mismos son utilizados para detectar actos de vandalismo, prevenir acciones delictivas o viales y todo converge en una acción como aporte a la comunidad. Todavía se está a tiempo.
Hay que parar con las fiestas o pedirle prestado el “barredor” a los santarroceños para limpiar a los bandidos del pueblo.