Es lo que se desprende de la entrevista concedida por Julio Leguizamón, abogado defensor del homicida Matias Piattoni, a una emisora local en las últimas horas.
Preocupa sobremanera a la defensa del imputado que la querella solicitará acusar a Piattoni por homicidio simple y no por homicidio culposo.
Piattoni drogado y borracho atropelló y mató a Ángel Ezequiel González y a su hijo Mateo de 12 años quienes se dirigían a bordo de una motocicleta a un lugar de pesca el pasado sábado 13 de febrero.
Enfocando la estrategia defensiva en la “victimización” del encartado, el abogado defensor de Piattoni aseguró que el imputado “está terriblemente acongojado, permanece todo el día en silencio, aislado, casi no recibe visitas. Permanece en su celda, pero nada más que eso”, aseguró.
En ningún tramo de la entrevista tuvo palabras o gestos de solidaridad hacia las víctimas ni mucho menos sus familiares vivos. La entrevista radial y los dichos del abogado defensor carecieron de un pedido de disculpas, un gesto de arrepentimiento por parte de su defendido o una muestra de empatía ante semejante tragedia.
Leguizamón al final terminó aclamando “un juicio justo, un juicio razonable e imparcial”, como si los términos del proceso y la aplicación de la Ley estuvieran en duda en algún momento.
Como parte de la estrategia el abogado Leguizamón con absoluta normalidad “victimizó” al acusado hoy preso, solicitando “que no se ensañen con mi cliente porque es conocido y demás”.
El abogado además argumentó invalidamente la intencionalidad de su cliente sosteniendo una premisa confusa alegando que “claramente no lo quiso hacer”.