Al igual que Manes, Larreta es el candidato que transita la ancha avenida del medio, aunque están decididos a transar con lo más corrupto y rancio del fascikircnerato con tal de llegar. Son los "candidatos" de la corporación y fieles custodios de "con lo mío no y lo mío está?".
Están dispuestos a continuar para que nada cambie y son los garantes del status quo de la casta política, amante del estado ELEFANTE a costa del progreso y la ascendencia social del contribuyente.
A diferencia de los oscuros patrocinadores que tiene Manes (como el grupo Macro del sospechado esquema Brito), Larreta sin embargo corre con la ventaja de ser Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y a la vista del blindaje mediático dispone la caja de los porteños para sostener su delirio presidencial.
Abstraídos del malestar social, cuya demanda en la lista de prioridades hoy está la corrupción, la inflación y la pobreza producto del robo al estado, tanto manes como larreta quedan como Ni serán candidatos, Ni serán presidente.